1 cuota de $1.400,00 sin interés | CFT: 0,00% | TEA: 0,00% | Total $1.400,00 |
2 cuotas de $831,04 | Total $1.662,08 | |
3 cuotas de $568,91 | Total $1.706,74 | |
6 cuotas de $314,67 | Total $1.888,04 | |
9 cuotas de $230,07 | Total $2.070,60 | |
12 cuotas de $188,42 | Total $2.261,00 | |
24 cuotas de $140,00 | Total $3.360,00 |
3 cuotas de $596,54 | Total $1.789,62 | |
6 cuotas de $328,53 | Total $1.971,20 |
3 cuotas de $602,75 | Total $1.808,24 | |
6 cuotas de $330,89 | Total $1.985,34 | |
9 cuotas de $247,60 | Total $2.228,38 | |
12 cuotas de $202,78 | Total $2.433,34 |
18 cuotas de $155,89 | Total $2.806,02 |
El molde de hojalata es una opción clásica para hornear la pastafrola. Este tipo de molde es conocido por su capacidad para distribuir el calor de manera uniforme, lo que ayuda a obtener una cocción pareja y una base crocante. Además, la hojalata es un material duradero y económico, aunque requiere ciertos cuidados, como un buen secado después de lavarlo para evitar que se oxide. Al usar un molde de hojalata, es recomendable enmantecarlo y enharinarlo ligeramente antes de colocar la masa, para facilitar el desmolde del postre una vez cocido.